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Códigos de barras: cómo ayudan a los minoristas

Tiempo de lectura: 5 minutos

Artículo sobre los códigos de barras y cómo estos ayudan a los minoristas
Generar un código de barras para cada producto de un negocio puede resultar una idea excelente en términos organizativos y de fidelización de clientes.

ÍNDICE

1. Código de barras en el comercio minorista.

2. Conectar con el cliente y fidelizarlo.

3. Un paso hacia la transformación digital.

4. Software de código de barras.

5. Programa HolaERP.

Generar un código de barras puede hacer más fácil la vida a los comerciantes. Y es que, como veremos en este artículo, la automatización resulta clave para mejorar la gestión del stock disponible y también para hacer transacciones más rápidas. Esto dota de una mayor eficiencia a todo el proceso y tiene una importante repercusión en los negocios.


1. Código de barras en el comercio minorista

Los códigos de barras se han convertido con el paso del tiempo en el estándar más empleado en múltiples sectores para identificar de forma individualizada productos o bienes de una misma referencia. De hecho, la mayoría de los productos envasados cuentan con este código, que no solo se encarga de identificar cada uno de los artículos, sino que también permite almacenar una amplia información relacionada con él, como por ejemplo su precio o una breve descripción.

Cada vez que se pasa un código de barras por un lector, este devuelve una secuencia numérica. No obstante, si el lector se encuentra integrado en un programa de gestión con capacidad para leer códigos de barras, lo que se consigue son unas entradas mucho más rápidas en la base de datos del negocio. Así, el cajero tan solo tiene que encargarse de escanear el producto y de forma automática se añade a la factura con el importe adecuado, el IVA que le corresponde y una descripción que determina de qué artículo se trata.

Las ventajas que se obtienen gracias a esto son principalmente dos. Por una parte, al escanear directamente el código se logra una importante disminución del número de errores, puesto que teclear a mano cada dígito puede resultar más complicado y, sobre todo, sujeto a un alto porcentaje de fallos. Además, cada cliente tiene que pasar un tiempo más bajo esperando para abonar su ticket, porque todos los cálculos se llevan a cabo de forma automática y tan solo es necesario cerrar la venta para pasar al siguiente cliente.

2. Conectar con el cliente y fidelizarlo

Los clientes también obtienen importantes ventajas al escanear estos códigos. Y es que se trata de un protocolo abierto que puede ser leído por cualquiera que cuente con un software compatible, como los que vamos a ver en los siguientes puntos.

Para los comerciantes también existe la posibilidad de utilizar distintos sistemas de fidelización de clientes. Como hemos explicado, este es un protocolo abierto que simplemente traduce cada número a un sistema donde cada barra representa un valor. Por tanto, haciendo uso de un generador de códigos de barras es posible crear uno para cada cliente de una base de datos. De esta forma se da un servicio completamente gratuito a los compradores en el que se pueden ofrecer descuentos o la acumulación de puntos.

A cambio, ellos entregan algo todavía más valioso para el negocio: fidelidad. Los clientes satisfechos volverán a comprar en la tienda para seguir beneficiándose de nuevas promociones. Y no solo eso, sino que también se puede hacer un rastreo de sus compras y se les pueden proporcionar descuentos personalizados basándose en sus gustos. Así, su recurrencia será todavía más alta y se forjará una relación más estrecha con la tienda.

3. Un paso hacia la transformación digital

Muchas empresas todavía no se atreven a dejar a un lado los papeles y los medios manuales para dar el salto a la transformación digital. Esto es algo normal, pero pone a todos esos negocios en una posición de desventaja respecto a su competencia.

Debemos tener en cuenta que implantar los códigos de barras es un gesto muy simple, puesto que apenas conlleva la impresión de algunas etiquetas. Pero, por otro lado, es un paso enorme para poner el negocio a la vanguardia de cada sector. Y lo hace de la siguiente forma:

  • La gestión de inventario se convierte en una tarea mucho más eficiente y con ella es posible dar el siguiente salto.
  • Automatizar muchas de las tareas diarias y optimizar los procesos de venta es algo que permitirá un mayor crecimiento y escalabilidad de la actividad.
  • Los costes totales también disminuyen, puesto que es necesaria menos mano de obra para llevar a cabo una misma tarea.
  • Es importante que se sepa valorar la trazabilidad de la información que estos códigos ofrecen, puesto que facilitan la toma de decisiones.

4. Software de código de barras

Si estamos pensando en cómo crear un código de barras, algo fundamental es contar con las herramientas adecuadas. Para ello, lo mejor es disponer de un programa que se encargue de hacerlo de forma automática. En el mercado hay múltiples opciones disponibles en función de la cantidad de trabajo que haya que sacar adelante.

Si la tarea es escasa, será suficiente con cualquier aplicación compatible. No obstante, si hay que crear una gran cantidad de códigos, se hace necesario utilizar herramientas profesionales que permitan trabajar con una base de datos completa, como es el caso de HolaERP.

5. Programa HolaERP

HolaERP es un software diseñado para facilitar la automatización de tareas en las empresas minoristas y funciona a la perfección con la integración de códigos de barras. De hecho, gracias a ellos resulta mucho más sencillo aprovechar todas las características que incluye como el seguimiento de las ventas, la gestión del stock o la generación automática de facturas. Su curva de aprendizaje es muy rápida y convierte a este programa en una opción excelente para aumentar la eficiencia de cualquier negocio.

Como hemos visto, generar un código de barras es un trabajo sencillo y que tiene una importante repercusión en la empresa. Su integración en el uso diario permite atender a cada cliente de una forma más eficaz al reducir los errores y los tiempos de espera y también facilita la gestión de los productos que hay en el almacén. Por último, repercute de forma positiva en los clientes gracias a los programas de fidelización.