Las empresas data driven (impulsadas por datos) están siendo tendencia en los últimos tiempos.
ÍNDICE
1. ¿Qué es una empresa data driven?
2. Data driven y facturación
3. Consejos para empresas data driven
3.1. Contar con el software adecuado
3.2. Personal con experiencia
3.3. Definir unos objetivos
3.4. Desechar los datos que no son necesarios y buscar formatos visuales
3.5. Conocer la empresa
En este artículo vamos a analizar en qué consiste un enfoque data driven y cuál es su influencia en la facturación. Sin duda, aplicar las últimas tecnologías en un negocio puede resultar muy positivo, pero ¿cuáles son los mejores consejos para hacerlo? De todo ello hablamos a continuación.
1. ¿Qué es una empresa data driven?
A grandes rasgos, una empresa con enfoque data driven toma las decisiones estratégicas en función de la interpretación de una gran cantidad de datos. Para ello, es necesario llevar a cabo un proceso de digitalización de la empresa.
Además, hay que recopilar toda la información posible tanto de otras compañías de la competencia como del propio funcionamiento del negocio. De este modo, mejora la atención a los clientes y la comunicación, por lo que resulta más sencillo llegar al público objetivo que realmente nos interesa.
2. Data driven y facturación
Los datos de facturación de un negocio son de vital importancia para llevar a cabo de forma correcta un enfoque impulsado por datos. En este sentido, analizar toda la información relacionada con las ventas resulta muy eficaz a la hora de valorar los costes por hora de la mano de obra. También nos permite comprobar si los costes son excesivos o si el precio al que se ofrece un producto o servicio es adecuado.
Toda esta información puede ser decisiva para decidir entre varias estrategias. Por ejemplo, si descubrimos que estamos vendiendo muy por debajo del precio marcado por el resto de la competencia, podremos aumentar con facilidad los beneficios sin que las ventas se resientan.
Del mismo modo, gracias a un completo análisis de las horas a las que se factura, comprobaremos que no es necesario abrir el negocio en algunas franjas horarias, algo que puede modificar por completo la rentabilidad de un negocio. La facturación empresarial tiene altibajos, como es lógico, sin embargo, es habitual que a medio y largo plazo las tendencias se mantengan.
3. Consejos para empresas data driven
En los siguientes apartados vamos a ofrecer varios consejos para que una estrategia impulsada por datos alcance los objetivos esperados.
3.1. Contar con el software adecuado
Para trabajar con todo el flujo de información, resulta indispensable disponer de un programa de gestión y facturación que nos muestre todos los datos que necesitamos. Además, estos se han de extraer en un formato que pueda ser leído por cualquier ordenador. De esta forma, seremos capaces de procesar los datos que nos interesan y tomar las decisiones correctas en virtud de la información que recibamos.
3.2. Personal con experiencia
En muchas ocasiones, el jefe o encargado de la empresa ha de encargarse de esta tarea. Sin embargo, contar con la ayuda de un equipo de trabajadores experimentados puede resultar muy beneficioso. También tenemos la posibilidad de ofrecer una formación específica a una parte de la plantilla para que adquieran los conocimientos necesarios para ejecutar este tipo de trabajos.
En cualquier caso, la última decisión siempre recaerá en manos del gerente del negocio. No obstante, disponer de todos los datos explicados de manera correcta puede hacer este proceso mucho más sencillo.
3.3. Definir unos objetivos
Como en cualquier otra estrategia empresarial, hemos de tener muy claro desde el primer momento qué se espera conseguir con las decisiones que se van a tomar. Esto permitirá en el futuro efectuar un análisis más eficaz sobre el plan previsto. De este modo, también podremos comprobar si se ha leído la información de la forma adecuada y si se podría haber hecho algo de forma diferente.
Algo fundamental en este sentido es que seamos realistas. Los datos marcarán la tendencia a seguir, pero tenemos que mantener los pies en el suelo.
Por ejemplo, si descubrimos que en la franja horaria de 10 a 12 de la mañana las ventas son escasas, la decisión puede consistir en reducir un empleado. Esto aumentará los beneficios al final del ejercicio, pero tan solo significará un ahorro de unas 12 horas mensuales de mano de obra. Por lo tanto, si marcamos como objetivo un descenso de 20 horas, no se podrá cumplir.
3.4. Desechar los datos que no son necesarios y buscar formatos visuales
No toda la información que encontraremos en los distintos ficheros tendrá la misma relevancia. Si el objetivo consiste en aumentar la eficiencia, no hay que perder el tiempo con el análisis de aquello que no nos va a aportar algo positivo.
Por otra parte, no hemos de olvidar que revisar demasiada información es una tarea pesada y difícil. En este caso, resulta mucho más sencillo analizar los datos de la facturación empresarial si están representados de manera visual. Los gráficos suelen ser la mejor forma de encontrar pistas para adoptar las mejores decisiones.
3.5. Conocer la empresa
Hay casos en que, antes de comenzar nuestro análisis, ya tenemos claro que algo no funciona. Puede que el programa de gestión y facturación nos indique algún problema, como la falta de stock de un producto. ¿Se está vendiendo mucho?, ¿no estamos comprando suficiente? En cualquier caso, para facilitar este trabajo, una gran idea consiste en hacernos preguntas sobre qué está sucediendo. A partir de ahí, ya podremos efectuar más indagaciones y descubrir cuál es el problema.
Saber cómo funciona el negocio y estar pendiente de las posibles alertas son dos factores muy beneficiosos. Cuanto antes establezcamos un enfoque impulsado por datos, más rápido solucionaremos cualquier inconveniente.
El enfoque data driven se emplea cada día más en empresas de todo el mundo. Nada mejor que los datos para conocer cómo está funcionando un negocio. Por tanto, es fundamental dar el paso cuanto antes para alcanzar un nivel superior de eficiencia.