Modelo 115 y la clave para evitar sanciones fiscales este enero
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ÍNDICE
1. ¿Qué es el modelo 115?
1.1. Modelo 115 y otros modelos fiscales relacionados.
2. ¿Por qué es relevante el modelo 115 para los negocios?
3. ¿Quiénes están obligados a presentar el modelo 115?
3.1. Empresas y autónomos con alquileres comerciales.
3.2. Ejemplos comunes donde se aplica el modelo 115.
4. ¿Cómo se presenta el modelo 115?
5. Consecuencias de no presentar el modelo 115 a tiempo
En España, los autónomos y las empresas tienen la obligación de cumplir con ciertos trámites fiscales que les permitan declarar e ingresar los impuestos correspondientes a su actividad económica.
El modelo 115 modelo es fundamental para todos aquellos negocios que alquilan un espacio para su actividad, ya que les permite cumplir con sus obligaciones fiscales en relación con los pagos de alquileres. Debe ser presentado antes del 20 de enero, por lo que es importante que te asegures de cumplir con esta obligación fiscal para evitar recargos o sanciones. En este artículo, profundizaremos en qué consiste el modelo 115, su importancia, quiénes deben presentarlo y cómo hacerlo correctamente.
1. ¿Qué es el modelo 115?
El modelo 115 es una autoliquidación tributaria que permite a los autónomos y empresas declarar las retenciones efectuadas sobre los alquileres de inmuebles. Su objetivo es que los arrendadores de propiedades comerciales, como locales de negocio u oficinas, paguen las retenciones correspondientes al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
De forma más simple, el modelo 115 permite declarar el dinero que el arrendatario retiene al propietario del local en concepto de IRPF por el alquiler que paga. El modelo 115 es obligatorio para los arrendatarios que alquilan locales y oficinas para realizar su actividad comercial, ya que se trata de un mecanismo de control fiscal para asegurar que el propietario de la propiedad cumpla con su obligación tributaria.
1.1. Modelo 115 y otros modelos fiscales relacionados
Además del modelo 115, existen otros modelos fiscales que los autónomos y empresas deben tener en cuenta, como el modelo 111, que se utiliza para declarar las retenciones a cuenta del IRPF correspondientes a los rendimientos del trabajo, actividades económicas, o premios.
2. ¿Por qué es relevante el modelo 115 para los negocios?
El modelo 115 es de vital importancia para las empresas y autónomos, ya que garantiza el cumplimiento con la Agencia Tributaria en relación con los alquileres comerciales. Aunque se trata de una obligación relativamente sencilla, la falta de cumplimiento puede acarrear sanciones o recargos que afectan a la viabilidad financiera del negocio.
Además, este modelo tiene un impacto directo sobre la relación entre arrendatarios y arrendadores. Si una empresa o autónomo no presenta el modelo 115 correctamente, o lo hace fuera de plazo, puede enfrentarse a sanciones económicas que incrementan el coste de su actividad comercial. Así, cumplir con el modelo 115 no solo es una obligación fiscal, sino también una medida preventiva contra problemas con la Agencia Tributaria.
Otro aspecto relevante es que este modelo ayuda a mantener el flujo de tesorería controlado, ya que la retención aplicada al alquiler puede ser deducible para la empresa arrendataria, dependiendo de su situación fiscal.
3. ¿Quiénes están obligados a presentar el modelo 115?
El modelo 115 debe ser presentado por todas las empresas y autónomos que paguen alquileres por el uso de locales comerciales u oficinas. Esto incluye tanto a aquellos que alquilan locales en propiedades de personas físicas (particulares) como a los que alquilan en propiedades de empresas.
3.1. Empresas y autónomos con alquileres comerciales
Las empresas que tienen un local o espacio comercial alquilado deben presentar este modelo cada trimestre, siempre que realicen pagos de alquiler en los que se efectúa una retención por IRPF. Es importante aclarar que esta obligación no solo aplica a grandes empresas, sino también a autónomos con pequeños comercios, oficinas o locales.
3.2. Ejemplos comunes donde se aplica el modelo 115
- Alquiler de oficinas para autónomos o pequeñas empresas: Si un autónomo tiene una oficina alquilada para llevar a cabo su actividad profesional, deberá presentar el modelo 115 para declarar las retenciones efectuadas sobre el alquiler.
- Locales comerciales para tiendas o negocios minoristas: Un propietario de un comercio, que alquila un local para vender productos o servicios, también estará obligado a presentar el modelo 115.
- Alquiler de naves industriales o locales para actividades empresariales: Si una empresa dedica una nave industrial a la fabricación o distribución de productos y la tiene alquilada, deberá cumplir con esta obligación tributaria.
- Alquiler de plazas de garaje en locales comerciales: Si el arrendatario alquila plazas de garaje en el mismo inmueble donde desarrolla su actividad, estas también deben incluirse en la declaración del modelo 115.
4. ¿Cómo se presenta el modelo 115?
Debe presentarse dentro de los 20 primeros días de cada trimestre (abril, julio, octubre y enero) a través de la sede electrónica de la Agencia Tributaria. La presentación puede realizarse de forma telemática, lo que facilita el proceso y permite evitar errores o demoras que puedan resultar en sanciones.
El procedimiento es sencillo: primero se deben recopilar todas las facturas de alquiler donde se haya realizado la retención correspondiente. Después, se accede a la página de la Agencia Tributaria, donde se completa el formulario con los datos de la empresa, los importes de las facturas de alquiler y las retenciones practicadas. Una vez completado, se puede realizar el pago o la domiciliación del mismo.
5. Consecuencias de no presentar el modelo 115 a tiempo
No presentar el modelo 115 dentro del plazo establecido puede generar sanciones significativas por parte de la Agencia Tributaria. Estas son las principales consecuencias:
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Recargos por presentación fuera de plazo: Si el modelo se presenta fuera de plazo pero sin que la Agencia Tributaria haya emitido un requerimiento, se aplicará un recargo de un 1% fijo más un 1% adicional por cada mes de retraso.
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Sanciones por infracción: Si la Agencia Tributaria detecta el incumplimiento y emite un requerimiento, las sanciones pueden ser mucho más graves:
- Infracción leve: sanción del 50% sobre lo no ingresado.
- Infracción grave: sanción del 100% sobre lo no ingresado.
- Infracción muy grave: sanción del 150% sobre lo no ingresado.
El incumplimiento de esta obligación fiscal puede generar consecuencias económicas que afectan a la estabilidad de tu negocio. Por ello, es esencial realizar la declaración a tiempo y asegurarse de que los datos sean correctos.