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Todo sobre la Ley Crea y Crece

Tiempo de lectura: 11 minutos

Artículo sobre la Ley Crea y Crece
Gracias a la Ley Crea y Crece, fundar una empresa nos resultará mucho más sencillo.

La Ley Crea y Crece es una nueva norma de gran importancia para las empresas. Su finalidad es la de facilitar los trámites para crear compañías, una medida muy necesaria. Contiene varias novedades, que generarán un impacto positivo en los próximos años. A continuación, explicamos las claves a tener en cuenta.


ÍNDICE

1. Ley Crea y Crece.

2. Principales medidas que implanta.

2.1. Medidas de crecimiento.

2.2. Lucha contra la morosidad.

2.3. Fortalecimiento de la financiación.

3. Agilizar la creación de empresas.

4. Modernización del tejido empresarial.


 

1. Ley Crea y Crece

Esta ley tiene su origen en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que busca paliar los efectos de la crisis causada por la covid-19. La norma se aprobó el 28 de septiembre del 2022 con amplio respaldo del Congreso y con la participación de las comunidades autónomas. También se ha prestado atención a los principales actores económicos, cuya opinión siempre es relevante en estos asuntos.

La normativa destaca el papel de las empresas en la economía del país, pues sin ellas no se crearía riqueza. Ahora pasan a ser el centro de las políticas económicas del Gobierno, por lo que se quiere fomentar su creación. Una de las principales trabas para su constitución era, precisamente, los trámites administrativos. De entre todos los tipos de organización, se pone el foco en las pymes para potenciar su crecimiento.

Más allá de las novedades para las empresas, la lucha contra la morosidad o profundizar en la digitalización son otros aspectos clave de la ley. Por un lado, se busca incentivar al empresario para que responda a sus obligaciones de pago. Por otro, la factura electrónica se generalizará y actuará también como método para evitar impagos.

2. Principales medidas que implanta

El tejido empresarial, que salió malparado de la pandemia, ahora sufre los rigores de la inflación. Unas circunstancias tan difíciles requieren una adaptación de las leyes. No se puede evitar que las empresas más afectadas cierren, pero no hay razón para entorpecer que otras nazcan. Gracias a medidas como las siguientes, la recuperación se podrá acelerar.

2.1. Medidas de crecimiento

Facilitar la creación de una empresa por sí solo es insuficiente, pues su crecimiento es un factor fundamental. De nada sirve que los obstáculos al fundarla desaparezcan si no podemos hacerla crecer. La ley recoge que se eliminarán las regulaciones innecesarias, que serán sustituidas por procedimientos ágiles. También se amplía el catálogo de actividades exentas de licencia.

A través de la modificación de la Ley de Garantía de Unidad de Mercado, se refuerza la cooperación entre Administraciones. Además, se potencian los mecanismos de protección de las empresas y consumidores ante medidas que vayan contra ciertos principios, como, por ejemplo, los de proporcionalidad y necesidad.

2.2. Lucha contra la morosidad

La morosidad es una de las principales causas de pérdida de liquidez y rentabilidad en muchas empresas españolas. En este sentido, las pymes son quienes más la sufren al no disponer de suficientes mecanismos y recursos para afrontar un impago. Para paliar este problema, se extiende la obligación de expedir facturas electrónicas en todas las relaciones comerciales. Se busca así mejorar la trazabilidad y el control de los pagos.

También permite obtener información sistemática y ágil de los plazos de pago, al tiempo que se reducen los costes de una transacción. Asimismo, las empresas que no cumplan la Ley de Morosidad no podrán acceder a subvenciones públicas ni serán elegidas como entidades colaboradoras en su gestión.

Para aumentar la fiabilidad, se crea un Observatorio Estatal de la Morosidad Privada. Su función es la de seguir y analizar los datos de plazos de pago y promover buenas prácticas. Recogerá un listado anual con las empresas morosas que no cumplan las siguientes condiciones:

  • No paguen a tiempo un 5 % de las facturas.
  • El importe de las facturas sea superior a los 600 000 euros.
  • Afecte a personas jurídicas.

2.3. Fortalecimiento de la financiación

La financiación es un elemento importante para el nacimiento y crecimiento de una empresa. La ley establece medidas para mejorar instrumentos como el crowdfunding, la inversión colectiva y el capital riesgo. Se pone el acento en los métodos alternativos a la banca con el objetivo de aumentar la flexibilidad en el acceso a crédito.

3. Agilizar la creación de empresas

De entre todas las medidas, agilizar la creación de empresas es la más importante. Para ello, se reduce el coste económico para crear una sociedad de responsabilidad limitada. El capital social necesario pasa de 3000 euros a tan solo uno, lo que permite usar el resto de recursos para el crecimiento. El objetivo del Gobierno es equiparar a España con otros países del entorno, en los que no se exige una cantidad mínima.

Para ahorrar trámites, se facilita la creación de empresas de manera telemática a través del Centro de Información y Red de Creación de Empresas (CIRCE). Al usarlo, se reducen los plazos y algunos costes, como los notariales o los registrales. Por lo tanto, en poco tiempo es posible tener listo cualquier proyecto.

4. Modernización del tejido empresarial

La modernización del tejido empresarial es otro de los objetivos perseguidos. Pese a los avances de la digitalización, aún queda un largo camino por recorrer. La ley recoge la obligación de expedir y remitir facturas electrónicas, así como la posibilidad de efectuar firmas electrónicas. A la hora de cumplir con la exigencia, una excelente alternativa es emplear un programa informático especializado.

Se trata de una herramienta que permite generar facturas de manera automática, algo que facilita su gestión. Podemos almacenarlas, revisarlas y enviarlas con la mínima intervención humana. Así, reducimos los posibles errores, ganamos en eficiencia y aumentamos el grado de digitalización de la empresa.

Gracias a la Ley Crea y Crece, la creación de empresas se vuelve más sencilla. Ahora es posible constituir una sociedad con un solo euro, un avance muy significativo y que se dejará notar. También disminuyen las trabas burocráticas, cuyos trámites restaban agilidad al proceso e incluso se convertían en auténticos obstáculos. Sin duda, una norma que debemos seguir.